Significado espiritual del Zafiro
Los minerales y piedras preciosas son unos elementos que son importantes para atraer las energías positivas en tu vida. Hay muchos que pueden funcionarte para ello, para eso, conoce el significado espiritual del Zafiro y cómo te aportaría a tu bienestar del cuerpo y la mente.
Existen Zafiros de varios colores y cada uno tiene un significado específico para cada situación. Por ejemplo, el azul, representa la nobleza y la verdad.
Por su parte, el negro es para el conocimiento, el verde sabiduría. El naranja va relacionado con la creatividad.
De igual forma, el zafiro rosa va con la resiliencia, el zafiro violeta con el despertar espiritual. Asimismo, el blanco proporciona una visión distinta y positiva, añadido a la fuerza espiritual, así como la resolución interior. El amarillo, por excelencia, representa la abundancia en tu vida y lo que quieres alcanzar teniendo éxito. Esto quiere decir, que este importante mineral es ideal para una limpieza espiritual en Chicago.
Cabe destacar, que el zafiro, gracias a su poder espiritual, proporciona a las personas mayor orden y claridad donde haya duda y confusión.
Esto se debe a que te brinda fortaleza mental y te permite ver mucho más allá de algo ilusorio, lo que revela verdades ocultas.
Es importante mencionar, que esta hermosa piedra despierta y activa los chakras de la garganta y el tercer ojo, dándole una visión interior para centrarse en la capacidad para aportar ideas a las demás personas.
Por otro lado, el zafiro tiene propiedades mágicas que cura las relaciones de pareja, debido a que desvanece cualquier sentimiento negativo. Esta gema te dará la guía que necesitas para reconocer tus defectos y por ende, cambiarlos o mejorarlos.
El zafiro te servirá como un calmante emocional si estás en una lucha constante con recuerdos traumáticas. Teniendo como resultado que el dolor sea soportable y a superarlo. Este cristal poderoso te ayudará a mantener la disciplina para cumplir los compromisos y promesas e ir avanzando con éxito en tus proyectos.